29.1.11

Un tipo entra en una oficina de patentes...

Este hombre, siempre con sus historias! Por mucho que patente ya le digo yo que no tendrá éxito si no le da publicidad. Que es buen invento porque anda que no podría ahorrarse tiempo en los viajes, pero no tiene visión de negocio. Es un enamorado de la mecánica, eso no hay que negarlo, pero que trabajar por amor al arte no da de comer! Nada, en cuanto vuelva le voy a decir que tenemos que empezar a vender ese invento suyo, explotar esa idea que tanto trabajo y esfuerzo le ha llevado. No me puedo quejar, no nos falta de nada por ahora, pero la vida da muchas vueltas y me gustaría que se le reconociera el talento y que la gente pudiera ver lo práctico que resulta moverse tan a gusto. Nada, nada, un día se lo voy a coger sin que él se entere y me llevo a los niños a dar una vuelta. Se iban a morir de envidia todas las vecinas! Puede que ahora que empiezan las rebajas...

19.1.11

David Guetta feat. Kelly Rowland

Recuerdo una película en la que el amor lo era todo y en torno a él giraba el argumento. Claro, claro, películas de ese tipo hay todas las que quieras y más. Hay alguna en la que no aparezca un elemento romántico? Ahora se pone uno a pensar en pelis de miedo y todo eso. Pero bueno, ahí tampoco aparece alguna vez una referencia sobre el amor? Y no me refiero al amor en términos de pareja, besitos y abrazos. Hoy estuve pensando (albricias!) y claro que hay amor en todos los sitios. Camiseta que veía, camiseta que hacía mención al tan mencionado tema. Canción que sonaba, elemento de deseo y admiración al que se dedica. Total, que todo está lleno de amor y al final una no se puede resistir.
Así pues, todos queremos a alguien o algo, pero quererlo no para tenerlo sino que, ya teniéndolo, lo adoramos y lo esperamos como agua de mayo. Lo idolatramos aspirando a conservarlo para siempre, inmutable y perpetuo en los sentimientos que nos inspira. Claro que depende de nosotros en todo momento. El amor de una madre a su hijo, el amor hacia un amigo, el estar locamente enamorado del dorado sol al amanecer o de la niebla corriendo por las montañas. Todas esas cosas que retenemos tan hondamente, que nos estremecen, es amor? Eso cada cual que analice su temblor al pensarlos, verlos y sentirlos.
Proseguí mi camino sumida en tales pensamientos y salieron las frases hechas, entre las cuales me quedé con "del amor al odio hay un paso". Realmente es tan fácil pasar de uno a otro? Bueno, igual soy yo, pero no he sentido amor por nada y luego, así de repente (y no tan de repente) odiarlo. Maticé pues el refrán aplicado a una realidad más cercana y dije "del amor a la indiferencia hay un paso". Eso ya me suena mejor. Una se pasa la vida queriendo a amigos, conocidos, familiares, que no hacen más que autocompadecerse y apoyarse en los demás para seguir adelante sin hacer esfuerzo alguno para continuar solos. Gente que se regodea en su sufrimiento y también en su felicidad y que aprovecha cualquier pequeño hueco para meterse hasta los huesos y destrozarle a uno las ganas. Todos hemos tenido algún percance similar y no creo que todos andemos por ahí odiando sino más bien mostrándonos indiferentes ante el devenir de esos personajes. Porque odiar es algo muy serio, una palabra que conlleva muchas cosas. Si es lo contrario que el amor y estamos convencidos de que el amor es muy grande, acaso su antagonista no debería ser igual de grande? De todas estas elucubraciones llego a una conclusión satisfactoria: millones de camisetas, canciones, libros y películas no pueden estar equivocados. Tanto a favor de las mariposas en el estómago.

17.1.11

I love to laugh, but they keep on smiling seriously

Las últimas semanas he estado un poco ocupada y no he tenido tiempo ni de pararme. Después de estar rodeada de "almost-relatives" bastante pesados y falsos en las fiestas, me di cuenta de lo bien que vivo en mi mundo de sinceridad arrasadora y a veces doliente, sí, pero aquellos que lo valoran no me lo echan en cara si no que lo toman como algo normal. Ya lo dice Andrés "la sinceridad no es una virtud, es una obligación". Tras ello siguió unas semanas que pasaron más rápido de lo que trabaja mi mente rodeada de personas para las que pagar da prestigio (pero no trabajo, claro), que saben mucho y sin embargo se han quedado en la cuneta. Gente de traje y tacones que se emocionan con un tema insulso y demasiado adornado por aquellos a los que les cuesta disimular que se nos está tratando como ganado. Incentivando la competitividad consiguieron que salieran grandes frases alrededor de un plato de pote y un sandwich. Claro que luego, todos esos cuyas cabezas sobresalen por encima de todos bajan la cabeza y titubean ante cualquier oposición. Total, que he llegado a la conclusión de que quién quiere hacer un couching cuando hay gente tan tendente a la autocompasión y a creer que están salvando el mundo. Muchachos, abrid los ojos y bailad, malditos, bailad! Yo por lo menos lo estoy haciendo.