30.8.09

Definitively or maybe?

El brit-pop no existiría sin ellos. Junto con Blur, revolucionaron la música, hicieron que el Reino Unido volviese a renacer décadas después de su primer alzamiento. Nada se puede decir de ellos que no haya sido dicho ya (incluso en ocasiones por ellos mismos) Egocéntricos, prepotentes, engreídos, niños mimados por estar a la cabeza de una generación, no olvidaron sus diferencias y eso fue precisamente lo que les ha separado. Ya en varias ocasiones se dijo que lo dejaban, que se acabó lo que se daba. Ahora parece que es de verdad, pero conservo la esperanza de que hagan las paces y maduren. Que yo tengo un hermano y entiendo de estas riñas. Mientras, aquí dos joyas del principio y el final de los que también llegaron a ser tan conocidos como Jesús.

25.8.09

Manolos sólo los Blahnik, por favor

Ayer comentaba, más que explicaba, a mi madre el llamado síndrome Maripili. Este trastorno moderno implica una sumisión por parte de la mujer, un miedo a ser rechazada que la impide avanzar tanto en su vida privada como en su vida familiar. Mi madre, presa de un ataque de auto-defensa, se enzarzó en una especie de monólogo en el cual llegaba a la conclusión de ser victima de tal trastorno debido, sin duda, a la mala influencia de su entorno (véase, sus hijos y su marido) Haciendo caso omiso a sus quejas, única manera de sobrevivir en un entorno tan fluctuante, me puse a buscar lo que suponía realmente ese síndrome y, oh sorpresa, encontré la horma de su zapato. El síndrome del Manolo. Vi en él reflejada la figura parental, el que todo lo sabe, todo lo controla y todo lo ordena bajo la frase "porque si!". No me asusté sino que me eche a reir dándome cuenta una vez mas que los psicólogos, con todos mis respetos, deberían mirar más a su alrededor antes de hacer cualquier diagnóstico. Siempre han existido Maripilis y Manolos y siempre los habrá mientras el hombre sea hombre y la mujer mujer. Mientras haya esa separación, esa distinción tan superflua. Si somos iguales, porqué existe un día de la mujer trabajadora y no un día del hombre trabajador? Por qué aún seguimos exigiendo los mismos derechos que ellos cuando ya los tenemos? No hay que exigir, mis queridas amigas, hay que ejercer, como si fuera la cosa más normal del mundo. Mi madre entiende el feminismo como una corriente extrema y radical basada en la erradicación del hombre, en la destrucción de su estima y sus derechos. Cosas de haber vivido bajo el yugo machista tantos años; se va una de un extremo a otro. Pero nada más lejos de la realidad. Ser feminista no debe significar ser mejor que los hombres, o creerse mejor que los hombres; es entender que se es diferente a los hombres, desde el punto de vista físico y psicológico lo somos, es un hecho, pero no por ello tenemos que renunciar a derechos, a deberes y a hacer lo que nos venga en gana. El derecho da libertad y la libertad es poder elegir entre varias opciones. La opción de las Maripili puede que venga condicionada por factores externos, normalmente un Manolo por marido... Y ahora se me plantea una pregunta que dejo en el aire, qué fue primero: el huevo o la gallina?

2.8.09

Ah, la inmensidad del agro

Estos días estivales son días de escapada a lo autentico, de volver a las raíces y disfrutar de la vida sencilla. Queda aquí este homenaje a todos aquellos que en dos horas escasas se plantan en la España profunda.